Charles Bukowski fue uno de los escritores más prolíficos, originales, crudos y extremadamente divertidos del siglo XX. Escribió diversas obras en forma de sátiras novelas, crónicas, ensayos, relatos cortos y una infinidad de poemas en los que demuestra su sensibilidad como escritor pesé a ser catalogado por algunos cómo un simple borracho malhablado. Bukowski desarrolló su obra literaria en Estados Unidos, y más concretamente en Los Ángeles, una ciudad por la cual siempre sintió amor y odio.
Autor : Gabe Leonard |
“Un intelectual dice algo simple de una manera difícil y un artista dice algo difícil de una manera simple” - Charles Bukowski
Bukowski marcó un cambio de paradigma sobre el realismo sucio, genero literario estadounidense que pretende reducir la narración a su más simple expresión, sin tantos versos que sirvan de adornos, ni etiquetas socioculturales; es decir un género donde se pueda escribir sobre sexo, mierda, tetas... y todas las palabras que diariamente son utilizadas por el hombre común. Entre sus obras destacan Cartero (1971), Factótum (1975), La senda del perdedor (1982) y Música de cañerías (1983).
En su primera novela, "Cartero", también es la primera aparición de Henry Chinasky, un alter ego de Bukowski destinado a reaparecer en todos sus trabajos posteriores, excepto en "Pulp". La novela cubre su vida desde el año 1952 hasta su renuncia final al Servicio Postal de los Estados Unidos en 1969. Durante este tiempo, Chinaski/Bukowski trabajó como cartero. Después de renunciar, se mantenía apostando en carreras de caballos, pero finalmente vuelve al servicio postal para trabajar de distribuidor.
En "Factótum" ( la segunda novela de Bukowski ) sigue la vida del perpetuamente desempleado y alcohólico Henry Chinaski, que tras haber sido rechazado en la llamada a filas de la Segunda Guerra Mundial se queda por las calles de mala muerte de Los Ángeles en busca de un trabajo que no se interponga entre él y su primer amor, la escritura.
El relato de un muchacho tosco y desadaptado, condenado a una vida vagabunda ha quedado registrado en "La senda del perdedor" uno de sus libros más oscuros. Bukowski a través de su alter ego, Henry Chinasky queda definido como un cronista de las penurias contraculturales, pues nos muestra una visión muy distinta del "Sueño Americano", una perspectiva "desde abajo" donde yacen los pisoteados y humillados que trabajan para los sueños de otros. En esta novela se narra la infancia, adolescencia y juventud de Henry Chinaski, en Los Ángeles, durante los años de la Depresión y la Segunda Guerra Mundial.
De sus recopilaciones de relatos destaca Música de cañerías (1983); las treinta y cuatro narraciones de que consta el volumen ofrecen al lector un sórdido recorrido por la vida nocturna de la ciudad de Los Ángeles. En estos relatos Bukowski representa personajes corrientes, desgraciados perdedores poco trascendentales que se cruzan durante algunos minutos en una habitación, bar o una esquina para compartir su soledad y alcohol; personajes con los cuales el lector puede sentirse identificado.
En los siguientes enlaces estarán disponibles para DESCARGAR desde el servidor de MEGA en formato PDF algunas novelas y relatos de Charles Bukowski.
NOVELAS :
Charles Bukowski - Cartero
Charles Bukowski - La senda del perdedor
Charles Bukowski - Pulp
RECOPILACION DE RELATOS
Charles Bukowski - Música de cañerías
Charles Bukowski - La maquina de follar
Charles Bukowski - Erecciones, Eyaculaciones, Exhibiciones
Charles Bukowski - Escritos de un viejo indecente
RECOPILACION DE POEMAS
Charles Bukowski - El amor es un perro infernal
Charles Bukowski - Toca el piano borracho
RELATOS SUELTOS
Charles Bukowski - Amor por 17,50 $
Charles Bukowski - Deje de mirarme las tetas, señor
Charles Bukowski - El diablo estaba caliente
Charles Bukowski - Esto es lo que mato a Dylan Thomas
Charles Bukowski - No puedes escribir una historia de amor
Charles Bukowski - Secuelas de una larguísima nota de rechazo
Charles Bukowski - Se busca una mujer
Bukowski es el héroe de los jóvenes rebeldes, pues en su amor y odio hacia la ciudad de Los Ángeles logró capitalizar las inquietudes de la América pobre, la que escasamente sueña, esa América ajena a toda la mierda que Hollywood le ofrece.
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